La activación del Plan DN-III por parte del Ejército Mexicano en varias regiones de Chihuahua representa una medida de emergencia ante fenómenos climáticos intensos. Aunque la activación inicial se dio en municipios del centro y norte, autoridades han señalado que Jiménez podría verse involucrado si las lluvias continúan con la misma intensidad.

Para el sector empresarial, la medida implica una advertencia logística: rutas de transporte podrían verse bloqueadas, eventos cancelados, y actividades productivas ralentizadas si se requiere movilizar personal o evacuar zonas rurales. Las empresas agrícolas y de transporte —dos pilares económicos del municipio— deben revisar sus protocolos internos de respuesta ante contingencias.

El Plan DN-III implica también una reestructuración de recursos: las administraciones municipales deben canalizar personal y presupuesto para tareas de prevención, monitoreo y apoyo. Esto afecta indirectamente la inversión pública en obras menores y mantenimiento urbano, que muchas veces quedan en pausa ante emergencias climáticas.

Red República recuerda: cada tormenta no solo prueba drenajes, también pone a prueba la resiliencia productiva.